Consejos para principiantes en el solitario Spider

No tengas prisa

Una forma fácil de perder numerosas partidas es simplemente mover la primera carta que parece útil. A menudo habrá otro movimiento mejor.
Revisa las distintas opciones y decide cuál es más probable que te conduzca hacia la victoria.
Incluso cuando encuentres un movimiento mejor, es posible que aún haya otro que lo supere.

Planifica tus movimientos

Llevar a cabo movimientos aleatorios difícilmente resulte en muchas victorias.
Intenta encontrar una combinación de movimientos consecutivos que alcancen algún objetivo útil, como destapar una carta, reducir el número de escaleras rotas o completar un palo.
Pero también ten en cuenta el coste de alcanzar un objetivo, como la pérdida de una columna vacía o la adición de muchas cartas en una misma columna.

No abandones fácilmente

Muchos jugadores abandonan e inician una nueva partida cuando les parece que van a perder.
Sin embargo, muchas partidas de solitario Spider pueden ganarse a partir de posiciones difíciles, e incluso desde algunas que parecen imposibles.
De hecho, con 4 palos las victorias sencillas no son nada habituales. Así que abandonar fácilmente garantizará un índice muy bajo de victorias.

Estrategia al principio de la partida

Al menos en las primeras rondas de la partida, la estrategia más obvia debería ser intentar vaciar una columna.
De hecho, prácticamente ningún juego puede ganarse sin vaciar columnas. Un método es hacerlo a cualquier precio y otro consiste en evitar algunos movimientos que podrían permitir destapar varias cartas.
El mejor consejo parece ser hacerlo a cualquier precio. Sin embargo, ten en cuenta que esta opción puede volverse en tu contra. Tal vez te interese experimentar un poco.

Vigila los ases

El as tiene la distinción de ser la única carta sobre la que el jugador no puede situar otra.
Solo un reparto puede situar una carta sobre un as, lo que convierte a los ases en cartas problemáticas. Demasiados ases abiertos pueden causar una derrota, pues reducen el número de posiciones donde puedes situar las cartas.

A medida que el juego progresa, el jugador debería vigilar dónde se encuentran los ases y si cada uno de ellos puede convertirse o no en un problema.
A veces es mejor realizar un movimiento que destapará un as y otras veces, no. Como muchas otras cosas en este juego, hay que valorarlo en cada caso.
Cuando un as está en una columna y bloquea el acceso a numerosas cartas, ya sea destapadas o no, normalmente es buena idea moverlo, si es posible, pero no necesariamente, a la primera oportunidad que se presente.
Recuerda también que ningún palo puede completarse sin el as, así que tapar demasiado los ases puede volverse en tu contra.

Ventajas de los reyes

La mayoría de los jugadores de solitario, especialmente los principiantes, consideran que el rey es la carta que más tienen que vigilar (aunque esta creencia está justificada, el as es probablemente más problemático).
El rey tiene unas cuantas ventajas que la mayoría de los jugadores parecen obviar.
Sobre un rey pueden añadirse hasta doce cartas, más que sobre ninguna otra carta. Esta cualidad hace que el rey sea ideal para encabezar una columna. Además, salvo en raras excepciones, el rey es la única carta que puede retirarse del tablero sin que el jugador la mueva.
Esta ventaja es enorme. En cierto sentido, realmente hace que el rey sea la carta más importante de todas. Así que no le pierdas el respeto al rey.

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